El 6 de septiembre de 2018. Bolsonaro fue apuñalado en un acto de su campaña electoral. El atacante fue absuelto por considerárse inimputable.

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se sometió ayer a una nueva cirugía en el abdomen, la cuarta desde que fue acuchillado en plena campaña electoral el año pasado, y permanecerá internado al menos hasta el jueves, se informó oficialmente.

"Otra cirugía; en esta oportunidad fueron cinco horas, pero estamos bien; gracias a todos por el apoyo y las oraciones, gracias Dios por mi vida; en breve estaré de regreso a la cancha", afirmó el mandatario en Twitter cinco horas después de salir del quirófano.

La operación corrigió una hernia de siete centímetros de diámetro en el abdomen, producto del debilitamiento muscular provocado por las anteriores cirugías.

La intervención, considerada de complejidad media y bajo riesgo, se prolongó por cinco horas, casi el doble de lo previsto.

"El paciente, que presenta estado clínico estable, hará la recuperación en la habitación" y "por orientación médica, las visitas serán restringidas por el momento", informó el hospital Vila Nova Star, de la ciudad de San Pablo -donde se efectuó la cirugía- en un parte divulgado ayer por la tarde.

El vocero presidencial, Otavio Do Rego, afirmó en conferencia de prensa que Bolsonaro delegó el cargo en el vicepresidente, general Hamilton Mourao, y volverá a asumirlo cuando los médicos lo aconsejen.

"Por norma legal, el presidente le transmitió el poder al vicepresidente y la previsión es que lo ejerza interinamente por cinco días a partir del domingo", dijo Do Rego. Agregó que "los cinco días son un plazo técnico y no el de recuperación; después de ese período se evaluará, pero la decisión es técnica (de los médicos)".

Pese a la demora en la cirugía, el médico, Antonio Macedo, aseguró que no hubo "ninguna complicación".

"La demora es normal". dijo.