Buenos Aires, 9 de diciembre.- La jefa del Gobierno regional de Bengala, Mamata Banerjee, declaró que 41 cadáveres han sido llevados a un centro sanitario de la ciudad, y que aún hay una veintena de cuerpos en las plantas altas del edificio, según la agencia local IANS.

Mamata describió el siniestro por causas "desconocídas" como un "crimen imperdonable" fruto de la "negligencia" y pidió que se aplique "la condena más dura posible" a los responsables, según la cadena NDTV. Los medios locales recuerdan que el mismo hospitalario ya sufrió un incendio de grandes dimensiones en 2008.

"Hemos trasladado 50 pacientes a un hospital adyacente. La situación es actualmente espantosa", comentó el director de la brigada de bomberos, Gopal Bhattacharya.

Varias unidades de bomberos proseguían poco después del mediodía local las labores de rescate, aunque medios locales informaron de que los equipos ya habían evacuado a la mayoría de personas del centro hospitalario.

Voceros del cuerpo de bomberos informaron poco antes de que el incendio estaba controlado y sólo subsistían focos en el sótano del edificio, pero admitieron que desconocían el número de pacientes que permanecían en el interior del inmueble.

Allegados y parientes de los pacientes, congregados al exterior, asistían angustiados al trabajo de los socorristas

El incendio se declaró por causas desconocidas en el hospital de AMRI, localizado en el barrio de Dhakuria, en el sur de la ciudad, al que se han desplazado cientos de familiares y amigos de los ingresados para conocer la suerte de sus seres queridos.

Testimonios del horror

Algunos pacientes y miembros del personal que consiguieron escapar relataron cómo se habían despertado en medio de una espesa humareda. "Estaba aterrorizado, no cesaba de gritar pidiendo ayuda", dijo Jyoti Chaudhary, que había sido internado hacía una semana en este hospital. "Finalmente, una enfermera me arrastró hacia afuera y me llevó hasta la planta baja".

Ananya Das, de 34 años, estaba en el servicio post-operatorio después de una intervención quirúrgica menor en la víspera, cuando se declaró el incendio. "Conseguí caminar hasta la salida y luego me descolgué por una ventana. Vi numerosos cadáveres", señaló.

Un habitante que participó en las labores de socorro, Badal Sikari, declaró haber visto "varios cuerpos" sin vida, al parecer de personas que fueron asfixiadas por el humo. En medio de ese caos, los camiones de los bomberos tuvieron dificultades para avanzar hasta el hospital, situado en medio de un verdadero laberinto de calles estrechas.