Diputados de Chile votan hoy si aprueban o no la eutanasia en el vecino país.

El proyecto ya tuvo sus etapas de modificaciones y aplazamientos y ha llegado la hora de decidir qué se hará. 

La letra se llama 'Muerte digna y cuidados paliativos' y determina, básicamente, que las personas que padezcan enfermedades graves o terminales pueden solicitar la eutanasia o el suicidio asistido. 

"Quiero una buena muerte" 

Cecilia Heyder, una chilena que juró que "nunca más volvería a pisar el hospital del cáncer" (el Instituto Nacional del Cáncer de Santiago), ruega que el proyecto se apruebe. Fue diagnosticada con cáncer de mama en 2011.

"Quiero una buena muerte, quiero que me seden. No quiero ir ilegalmente donde lo hacen los grupos proeutanasia (...) Tengo metástasis, no sé dónde porque me niego a que me hagan estudios (...) Aparte de eso, tengo lupus eritematoso sistémico, otras patologías y hace dos años, desarrollé una deficiencia de factor 7, que es que no hay coagulación, así de simple", explica. 

Cecilia sabe que le falta poco y quiere evitar el sufrimiento. Cualquier corte, hematoma o hemorragia puede matarla. Además, vive con un dolor constante. También tiene que moverse con dos catéteres: uno para la transfusión de sangre y otro para la morfina. 

Cecilia se ha convertido en una activista a favor de la eutanasia, alega que su partida definitiva debe ocurrir frente a los ojos del Estado. 

"Quiero todo legal. Siempre he sido transparente. Siempre he dado la cara en todo lo que he hecho y eso es lo que pido ahora", agrega. 

Voces en contra 

Pero hay quiénes están en contra. Algunos alegan que la ley convertiría a los médicos en verdugos.

"Nos oponemos a la eutanasia y, por tanto, al actual proyecto de ley que se va a votar en la Cámara de Diputados. Porque la dignidad humana es inherente a todas las personas. No se pierde por el sufrimiento o la enfermedad", argumenta Rosario Corvalán, integrante del grupo antieutanasia "Comunidad y Justicia".

De ser aprobado por la Cámara Baja, el proyecto de ley pasará al Senado para una última votación. Chile podría convertirse en el segundo país de América Latina, detrás de Colombia, en legalizar la práctica.

En diciembre del año pasado, el proyecto de ley había sido discutido en el pleno, sin embargo, fue regresada a la Comisión de Salud de la Cámara para realizar modificaciones al texto tras algunas observaciones de los diputados. 

Euronews.