Los gobiernos de Chile y Bolivia elevaron ayer el tono de su disputa por el caso de los 3 soldados bolivianos encarcelados por ingresar armados a Chile. Piñera, manifestó su indignación con el Gobierno boliviano, y le pidió actuar ‘con más respeto‘. Mientras que el vicepresidente boliviano, García Linera, consideró el tema debería haberse resuelto diplomáticamente.