El gobierno de Colombia reveló ayer que "tiene evidencias que acreditan la presencia" en territorio de Venezuela de varios líderes guerrilleros de las FARC, lo que amenaza con agudizar aún más las diferencias bilaterales, a sólo tres semanas del cambio de autoridades en el Ejecutivo colombiano.
"El Gobierno nacional tiene evidencias que acreditan la presencia en la República Bolivariana de Venezuela de algunos cabecillas del grupo terrorista de las FARC y otros integrantes del grupo terrorista ELN", señaló un comunicado del gobierno de Alvaro Uribe.
El texto, leído por el vocero presidencial, César Velázquez, menciona entre esos cabecillas a Iván Márquez, Rodrigo Granda, Timoléon Jiménez, alias Timochenko, y Germán Briceño, alias Grannobles, los cuatro de las FARC, y a Carlos Marín Guarín, alias Pablito, del ELN. Velázquez adelantó que las pruebas serán presentadas en las próximas horas por el ministro de Defensa, Gabriel Silva.
Hace una semana, el presidente Uribe señaló que Luciano Marín Arango, el verdadero nombre de Iván Márquez, uno de los máximos jefes de las FARC estaba "escondido" en el extranjero. "Está escondido y nosotros sabemos dónde está. Lo tenemos ubicadito", dijo Uribe entonces, sin dar más detalles, aunque tanto él como otros integrantes del gobierno dijeron varias veces que el jefe guerrillero se oculta en Venezuela.
En cuanto a Granda, considerado el canciller de las FARC, fue liberado en junio de 2007 por decisión de Uribe, que accedió así a un pedido del presidente francés, Nicolas Sarkozy, para que el rebelde ayudara a lograr la entrega de la colombo-francesa Ingrid Betancourt, por entonces rehén de la organización.
