Estados Unidos, 29 de junio.- Una enfermedad rara le impide hacer una vida normal. Lizzie Velásquez, a sus 21 años, pesa sólo 27 kilos y eso que come cada 15 minutos. Esta historia, que revela el diario Daily Mail, está amargando la existencia a la joven universitaria de Austin (Texas) porque los médicos no encuentran ni explicación ni solución a su problema.

A pesar de no tener ni un solo gramo de grasa corporal, Lizzie no puede hacer una vida normal. Come con frecuencia para mantenerse en pie con fuerzas, pero jamás aumenta su peso. En total, llega a ingerir hasta 8.000 calorías diarias.

La universitaria no se priva de nada: papas fritas, dulces, tartas. El sueño de muchas personas, pero nada más lejos de la realidad. Su aspecto físico lo dice todo: su extremada delgadez recuerda a la de una anoréxica, pero su problema va incluso más allá. Tuvo problemas de vista y su sistema inmunológico es muy débil.