Durante la madrugada de este sábado, se pudo experimentar un histórico eclipse solar desde la Antártida, el que se extendió por una hora y 45 minutos, en un fenómenos astronómico que no volverá a repetirse en varias décadas. Mientras que en otras zonas del planeta se experimentó un eclipse solar parcial.

A partir de las 7.00 GMT de este sábado la Luna se interpuso ante el Sol y comenzó a proyectar una sombra sobre la Tierra hasta producir un eclipse solar total cuando las tres esferas quedaron alineadas en recta, un fenómeno que se vio en su plenitud desde la Antártida, que acogió a  grupos de científicos para su observación.

Más allá de haber tenido una duración total de dos horas, en rigor la cobertura total alcanzó solo 46 segundos.