El presidente de Ecuador, Rafael Correa, aseguró ayer que su revolución ciudadana "nada ni nadie la detiene", al considerar su victoria en los comicios de este domingo como un "baño de legitimidad democrática". Correa destacó que el pueblo ecuatoriano ratificó en las urnas el "proyecto en marcha de la revolución ciudadana. Esto nos da un gran espaldarazo político para seguir profundizando cambios".