El coronavirus llegó a la Argentina hace menos de 3 meses, sin embargo, los cambios que este ha propiciado parecerían estar modificando nuestra rutina de una manera impensada. ¿Por qué? Porque la evolución de nuestro estilo de vida no parece que vaya a detenerse una vez culmine la pandemia, sino que se mantendrá por mucho tiempo más.
Al analizar los principales cambios que estaríamos viendo en nuestro día a día, estos son los 3 en los que se prevé mayor longevidad:

1. ¿Trabajo? No, teletrabajo
Si bien es cierto que muchas personas apenas estarían dando los primeros pasos al mundo del trabajo desde casa, la realidad es que esta tendencia (que ya se estaba posicionando en los países más avanzados del mundo) se está asentando en Latinoamérica, pero no solo por el momento, sino de manera permanente.
Aunque resulta complicado determinar qué porcentaje de empresas adoptará esta modalidad de trabajo de forma fija, se estima que muchos tabúes alrededor de la misma ya han comenzado a disiparse.
Es por esto que a futuro tendremos que adoptar medidas que nos ayuden a optimizar nuestro Home Office, como puede serlo desarrollar rutinas de trabajo, descanso y ocio, diferenciar las tareas y asignaciones según su urgencia y relevancia, gestionar nuestro espacio de trabajo, eliminar distracciones, mejorar la coordinación del trabajo en equipo, entre muchas otras.
2. Comercio por Internet y entrega de productos
Similar a lo que se augura para el trabajo desde casa, el comercio electrónico parece haberse potenciado para no volver a ser lo que fue antes de la pandemia. El crecimiento en las primeras semanas habría sido superior al 100%, y se prevén al menos 2 años de crecimiento estable gracias a un incremento de 30% en el número de nuevos compradores.
Sin embargo, el e-commerce no solo estaría cambiando por el aumento en la demanda, sino también por la adopción de alternativas para la recepción de productos, especialmente la masificación del delivery y el Click and Collect.
¿Qué es Click and Collect? es cuando un cliente compra un producto por Internet, pero lo busca en un establecimiento físico. Este estaría siendo especialmente efectivo para las tiendas virtuales, ya que permite que las tiendas con menor potencial para el delivery de productos puedan seguir incrementando la demanda y sacándole provecho a la situación que vive el e-commerce actualmente.
Este no solo estaría siendo aplicado por distintas cadenas minoristas, sino que estaría siendo adoptado por buena parte de las marcas y empresas del país.
3. Socialización e higiene
Finalmente, la vida luego de la pandemia nos llevará a una serie de rutinas de socialización e higiene mucho más estricta, ya que algunas de las costumbres que teníamos en el pasado no solo pueden ser un peligro para nosotros mismos, sino también para las personas que nos rodean. Una actitud irresponsable puede llevar a un nuevo brote si no somos cuidadosos.
Abrazos, besos en la mejilla, y otras interacciones de extrema cercanía física no solo tendrán que ser monitoreadas, sino incluso eliminadas de nuestro día a día.
Del mismo modo, una vez que transcurran las fases iniciales de la pandemia tendremos que mantener las normas de higiene que hemos desarrollado en las últimas semanas, desde lavar nuestras manos cuidadosamente de manera constante y evitar tocar en exceso nuestros alrededores, hasta cubrirnos bien al toser o estornudar.
¿La vida luego de la pandemia comienza pronto? Todo indica que no, sin embargo, los cambios que estamos viendo desde la llegada de esta a nuestro país ya comenzaron, y parece que se quedarán por mucho tiempo una vez esta culmine.
