El presidente de Bolivia, Evo Morales, visitó ayer el centro arqueológico de Pisac, a 33 kilómetros del Cusco, parte del Valle Sagrado de los Incas, y dijo haber quedado ‘impresionado‘, en un breve descanso en este país, tras reunirse el jueves con su par peruano, Ollanta Humala. El jefe de Estado boliviano visitará mañana la ciudadela incaica de Machu Picchu, donde pasará las fiestas navideñas junto a sus tres hijos.