Recién vuelto a esta capital desde Temuco, Francisco fue esta tarde directo a una de las citas que más lo entusiasman: un encuentro con miles de jóvenes católicos. Ese tuvo lugar en el Santuario Nacional de Maipú, un lugar lleno de historia, donde tuvo lugar la batalla homónima, fundamental en la independencia de Chile, bajo las órdenes del general José de San Martín.

 

Allí, en un discurso inspirador, en el que utilizó léxico 2.0., muy actual, relacionado a la celularmanía y se salió del texto preparado, llamó a los jóvenes a no quedarse “sin conexión”, o sin “batería”, sino a volver a conectarse, a encontrar “la señal” a través una “contraseña”: Jesús. Además, los animó a ser “patriotas, no patrioteros”, y “protagonistas de la historia” de su país.