Un viaje de placer a Cancún terminó de la peor manera para una familia chilena. Todo comenzó cuando María Inés Contreras, que había ido a México para asistir al casamiento de uno de sus hijos, sufrió una herida leve en una de sus piernas. A partir de ese momento, diversas complicaciones de salud derivaron en la amputación del miembro y en el posterior fallecimiento de la mujer.

Según informó el programa de televisión chileno 24horas, la lesión de Contreras se produjo durante una excursión en barco a la Isla Mujeres. Su hijo, Fabián, contó: "La nave se movió y mi madre dio un paso en falso, golpeándose la pierna derecha. Fue un impacto que provocó una pequeña laceración".

Sin embargo, la herida empezó a infectarse y generó complicaciones cada vez mayores en el cuadro de la mujer, que comenzó a recorrer de urgencia diferentes centros médicos junto a sus hijos. Tras haber gastado todo su dinero en consultas, uno de los médicos le diagnóstico septicemia, una infección grave y generalizada que había comenzado a extenderse por su cuerpo. Ante esta situación y con el consentimiento de su familia, procedieron a amputarle la pierna.

Luego de la operación, Contreras permaneció internada en el hospital, pero su salud no mejoró. La infección, que ya había avanzado demasiado para entonces, provocó fallas a nivel respiratorio, renal y hepático que este domingo la causaron la muerte.

Por su parte, sus hijos denunciaron que a pesar de haber pedido ayuda en múltiples oportunidades al gobierno chileno, lo único que éste les ofreció fue trasladarla en un avión sanitario. Sin embargo, el costo del viaje era muy elevado, y para ellos fue imposible de pagar.