Buenos Aires, 16 de octubre.- El nuevo informe, publicado hoy, revela que la actividad del virus gripal va en aumento en Norteamérica, mientras que en Europa también se registra un aumento de casos, pero a niveles inferiores que en la primera región.

En las zonas tropicales del planeta se registra una "transmisión mixta", con aumento de casos en algunos países y descenso en otros.

Así, por ejemplo, "en la región tropical de América, varias islas caribeñas están registrando tasas de la enfermedad que van en aumento, mientras que en Brasil, Costa Rica y otros países del continente están disminuyendo".

En general, la OMS señala que en las zonas templadas del hemisferio sur se están detectando "muy pocos casos" del virus AH1N1.

La OMS reveló que sus expertos esperan que se cumpla un año completo de la pandemia para sacar conclusiones sobre la evolución y gravedad.

"No queremos sacar ninguna conclusión antes de que se cumpla al menos un año completo de la pandemia", declaró hoy a la prensa el portavoz de la OMS, Gregory Hartl.

Agregó que es importante esperar a que el hemisferio norte entre en invierno y observar lo que allí sucede para poder realizar una evaluación global sobre el comportamiento del virus AH1N1.

"Todavía no es invierno en el hemisferio norte y en el caso de la gripe estacional el pico (de casos) se registra normalmente entre enero y febrero", precisó.

Insistió en que "todavía no podemos decir nada de manera categórica" sobre la acción del virus, aunque reconoció que la gran mayoría de casos en el mundo han sido leves.

Sin embargo, subrayó enseguida que también se han registrado casos severos y que "por alguna razón que todavía no comprendemos" adultos con buena salud han sido severamente afectados por esta enfermedad.

"Esta es una de las piezas que falta para completar el rompecabezas", comentó Hartl.

El portavoz recordó que hay casos que "en menos de 24 horas" pueden convertirse en muy graves, una situación que demuestra que este virus "no actúa exactamente igual que el de la gripe estacional".

Por lo tanto, estimó que, aunque la tasa de mortalidad no sea elevada hasta ahora, es necesario que los países sigan preparándose para lo que pueda ocurrir en los próximos meses, conforme el invierno se asiente en el hemisferio norte.

Ello explica, agregó, que la OMS no haya realizado hasta ahora una comparación pública entre las cifras de víctimas y fallecidos a causa de la gripe A, y las que provocada cada año la gripe estacional (una media de 500.000 casos a nivel mundial).