En un referéndum histórico y que tiene en vilo a toda Europa, ayer los escoceses votaron si quieren o no que su país sea un Estado autónomo, es decir, que se independice del Reino Unido. Si bien estaba previsto que el resultado se diera a conocer recién en la madrugada de hoy (hora local), hasta anoche a última hora los sondeos previos insinuaban una apretada victoria del ‘no‘, la postura preferida tanto por los líderes británicos como por los mercados del viejo continente, por un margen de apenas 4 a 6 puntos.
Los colegios electorales cerraron tras quince horas de votación, a la que asistieron unos 4,3 millones de personas. Los datos de participación se harán públicos también hoy por la mañana, si bien se prevé que las cifras sean altas, dado que el 97% del censo electoral se registró para poder votar en alguna de las 5.579 urnas repartidas en 32 distritos electorales.
Los primeros indicios claros sobre el resultado del referéndum serán los que arrojen las grandes circunscripciones como Glasgow, con 486.000 votantes registrados, Edimburgo, con 378.000, y Fife, con 300.000. El anuncio del resultado final del plebiscito lo hará la responsable de la Comisión Electoral escocesa, Mary Pitcaithly.
La jornada electoral transcurrió en Escocia en un ambiente festivo y sin incidentes destacables. Los partidarios del ‘sí‘ tomaron las calles de ciudades y pueblos
en Escocia con banderas y pancartas, mientras que los favorables al ‘no‘ resultaron menos visibles.
A pesar de que el cielo estuvo cubierto por nubes durante gran parte del día, la lluvia no entorpeció la votación en la mayor parte de la región. En un día laborable en Escocia, numerosos colegios electorales informaron de colas ante sus puertas en algunos momentos del día, especialmente a primera hora de la mañana, cuando muchos ciudadanos aprovecharon para ir a votar antes de dirigirse a sus puestos de trabajo.
El referéndum reviste carácter de histórico porque, de ganar el sí, Escocia se separará tras más de 300 años de integración en el Reino Unido. Los independentistas argumentan las ventajas de una autonomía económica, en tanto que los ‘unionistas‘ sostienen que dejar el bloque les acarreará un aislamiento de los mercados europeos, en un contexto de inestabilidad en casi todo el continente.
(Fuentes: Télam, EFE)