El régimen del líder libio, Muamar el Kadafi, anunció ayer un alto el fuego inmediato en cumplimiento de la resolución de la ONU, mientras los rebeldes aseguraron que sus tropas continuaron atacando durante todo el día intensamente varias ciudades en el Oeste y en el Este del país.

La ausencia de periodistas independientes en los hasta el momento principales frentes de combate, debido a la insistencia del propio Kadafi en considerar ilegal su presencia en el país y asimilarlos a terroristas de Al Qaeda, impide ahora justamente verificar su supuesto alto el fuego que insistió en haber cumplido.

El portavoz de Defensa libio, Musa Ali, negó que el régimen esté violando el cese el fuego que anunció a primeras horas de la tarde y aseguró que no están llevando a cabo ninguna operación militar en Misrata, la tercera ciudad libia, ni en ninguna otra localidad del país.

Por su parte, la OTAN continuará con la planificación militar prevista para una posible operación en Libia a pesar de la declaración de alto el fuego.

Según fuentes aliadas, las autoridades militares de la OTAN podrían tener finalizada a lo largo del domingo la fórmula para imponer una zona de exclusión aérea sobre Libia, una de las opciones contempladas por la ONU.