La Justicia francesa confirmó un fallo que prohíbe rematar la casa en la vivió el general José de San Martín en la localidad de Boulogne Sur Mer (Francia). Ese inmueble pertenece al Estado argentino y funciona como museo.
La empresa estadounidense Sempra Energy Internacional intentó por la vía judicial el embargo y remate de la propiedad. Pero la Procuración del Tesoro de la Nación (abogados del Estado argentino) se opuso y obtuvo un fallo que reivindicó la calidad de "patrimonio histórico argentino" de la propiedad. A fines del mes pasado, la Justicia francesa notificó al Estado argentino que la empresa estadounidense, que había ganado una demanda ante el tribunal del Banco Mundial (CIADI), había decidido no apelar el fallo que el 5 de marzo último rechazó el pedido de embargo de la casa. Es decir que con esa decisión quedó firme la prohibición de embargar.
Sempra había iniciado una querella al Estado argentino porque las distribuidoras gasíferas Camuzzi Gas Pampeana y Gas del Sur (pertenecientes a la firma demandante) habían perdido valor a raíz de la devaluación surgida en 2002.
La compañía había pedido la hipoteca provisional sobre la casa para garantizar el cobro de una deuda luego de ganar el caso en el Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a Inversiones (CIADI), proceso sobre el que pesa un pedido de anulación por parte de la Procuración.
La hipoteca había sido concedida por la Justicia francesa en enero pasado, pero la medida fue objetada por el Estado argentino, que finalmente obtuvo un fallo favorable en marzo pasado de parte de un juez francés de primera instancia. Sempra también había puesto en marcha medidas ejecutorias en España.
Ahora, con la reciente sentencia, la casa museo en la que San Martín murió el 17 de agosto de 1850 mantendrá su funcionamiento como propiedad del Estado argentino. La casa consta de dos pisos con réplicas de objetos, mobiliarios, efectos personales y habitaciones en las que vivieron el Libertador y su hija Mercedes. "Se trata de una decisión histórica, porque da inmunidad a sitios que son verdaderos hitos de nuestra nacionalidad", expresó el procurador del Tesoro, Joaquín Da Rocha, jefe de los abogados del Estado argentino.
San Martín vivió en la vivienda de Boulogne Sur Mer durante los últimos años de su vida junto a su hija Mercedes. Tras la muerte de su esposa en Buenos Aires, el 3 de agosto de 1823, San Martín se embarcó a Francia en 1824 con su hija Mercedes, cuando las Provincias Unidas del Río de la Plata estaban sumidas en guerras civiles. Tras su llegada al puerto de L’Havre, bajo el reinado de los Borbones, sufrió persecución y siguió su viaje a Inglaterra, donde alojó a su hija en un internado de monjas. Luego de la caída de los Borbones en 1830 retornó a Francia y vivió en París. El general, quien había intentado un retorno fallido a Buenos Aires, residió en Europa hasta su muerte, el 17 de agosto de 1850 en la ciudad de Boulogne Sur Mer. Los restos de San Martín fueron sepultados en forma provisoria en la catedral de Notre Dame de Boulogne Sur Mer, en 1861 fueron trasladados al cementerio de Brunoy, y en 1880 a la Catedral de Buenos Aires.

