La científica argentina Sandra Díaz ganó este miércoles el premio Princesa de Asturias a la Investigación, uno de los galardones más prestigiosos del mundo al que puede aspirar un científico. El reconocimiento fue compartido con la estadounidense Joanne Chory. Ambas son especialistas en biología vegetal y estudiosas del impacto de la crisis climática.

El Premio Princesa de Asturias de Investigación Científica y Técnica reconoció el trabajo que desarrollan ambas biólogas por separado y que ubica en la vanguardia de nuevas líneas de investigación en torno a la crisis climática y sus efectos, así como en la defensa de la biodiversidad.

Díaz, doctora en Ciencias Biológicas y catedrática de la Universidad Nacional de Córdoba, es considerada una de las científicas más influyentes y reconocidas del mundo.

La científica se graduó en 1989 en la Universidad Nacional de Córdoba y desde 1994 es profesora allí e investigadora superior del Conicet en el Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal (IMBIV).

También trabajó en el Comité de Ciencias de la Tierra del Futuro, la iniciativa integrada del Consejo Internacional para la Ciencia (ICSU). Una de sus contribuciones de éxito fue el desarrollo de TRY, la base de datos común de los caracteres funcionales de las plantasmás grande de la historia a escala mundial.

Es la fundadora de Núcleo DiverSus, una red interdisciplinar que lleva a cabo investigación primaria y síntesis sobre la biodiversidad y la sostenibilidad, con énfasis en América Latina y proyección global.

Cuenta, además, con numerosos premios nacionales e internacionales, como el Premio Nobel de la Paz otorgado en 1997 al Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC), con el que trabajó entre 1994 y 2007.