Uno de los principales desafíos del papa Francisco será detener la sangría de fieles en América Latina, región que concentra cerca del 40% de los católicos del mundo y en donde crecen como espuma las iglesias evangélicas, dijeron ayer especialistas.
La elección de un papa procedente de un país en desarrollo, puso en evidencia el deseo de la Iglesia de mirar hacia fuera de Europa, hacia el hemisferio sur y hacia regiones en donde el catolicismo aún es dominante o tiene potencial de crecimiento, según los especialistas consultados.
Según un sondeo divulgado en febrero por el Pew Research Center, Europa dejó de ser mayoritaria entre los católicos, posición asumida por América Latina, en tanto que las regiones en las que esta fe crece actualmente con mayor dinamismo son el África subsahariana y Asia.
Según la opinión de Douglas Cabral Dantas, profesor de Cultura Religiosa de la Pontificia Universidad Católica de Minas Gerais, con la elección del argentino la Iglesia consigue responder al desafío de su desangre en América Latina, reforzar su crecimiento en países de Asia y África, y desviar la atención sobre Europa, ‘principal polo de los escándalos‘.
‘Los electores del papa pensaron en varias cosas cuando votaron por un latinoamericano, entre ellas que América Latina es la región con la mayoría de los católicos en el mundo y en la necesidad de mantener esa mayoría‘, según Ildo Bohn, secretario de información del Centro de Estudios Bíblicos de Brasil.
Según el sondeo del Pew Research Center, el número de católicos en el mundo saltó desde unos 291 millones en 1910 hasta 1.100 millones en 2010, pero la participación de los europeos en esa comunidad cayó en esos cien años del 65 al 24%. En el mismo periodo los católicos latinoamericanos subieron de 70 a 425,5 millones de almas, lo que supone que su participación pasó del 24% a comienzos del siglo XX al 39% en 2010.
El número de católicos en Asia y Oceanía era de 130,5 millones en 2010 (12% del total), y en África y Oriente Medio era de 177,1 millones (17%).
Mientras que hace un siglo Francia e Italia lideraban la lista de países con mayor número de católicos en el mundo, esas posiciones son ocupadas hoy por Brasil (126,7 millones) y México (96,4 millones). Colombia es sexto en la lista con 38,1 millones y Argentina undécimo (31 millones). Sin embargo, a pesar de la esperanza que América Latina representa para el catolicismo, esta fe perdió espacio en la región.
Hace cien años el 90% de los latinoamericanos se declaraba católico, porcentaje cayó al 72% en 2010. El CELAM diagnosticó en 2007 tanto la fuga como las causas de esa evasión, pero hasta ahora no ha anunciado ninguna transformación que pueda contener la sangría.