Una jueza federal de Estados Unidos ordenó mantener detenida temporalmente sin posibilidad de fianza a Emma Coronel Aispuro, la esposa del narcotraficante mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán.

La joven, de 31 años, fue arrestada el lunes en un aeropuerto cerca de Washington bajo sospechas de estar involucrada en el tráfico de drogas. Según señala la acusación del Departamento de Justicia, la mexicana integraría una red que traficaba a Estados Unidos cocaína, marihuana y metanfetaminas. Además, es señalada de colaborar en dos complots para ayudar a Guzmán a escapar de prisiones mexicanas.

Coronel conoció al fundador del Cártel de Sinaloa cuando tenía 17 años y fue coronada como reina del Festival del Café y la Guayaba, en México.

Después de su boda, celebrada en Durango, Emma ha ostentado una vida llena de lujos y comodidades, la cual suele compartir en sus redes sociales. Por ejemplo, para las fiestas de cumpleaños de las dos hijas gemelas que tuvo con el capo, ha llegado a gastar hasta medio millón de pesos mexicanos (25.000 dólares).

Una de las más recientes fue compartida a través de su cuenta de TikTok. En las imágenes se observa la ostentosa decoración de una fiesta temática de la muñeca Barbie que la modelo organizó para el cumpleaños número 7 de sus hijas.

Otro de los videos que publicó en esta red social muestra una gran fiesta de lujo llevada a cabo en una hacienda. Ahí se ostentan varios autos deportivos de marcas como Ferrari, Porsche, Audi, BMW y Lamborghini. En otra grabación mostró un lujoso Mercedes-Benz de la línea AMG.

La empresaria también ha dejado en evidencia las máquinas que posee para contar fajos de dinero y los costosos productos que compra casi a diario. También se le ha observado realizando distintos viajes a sitios lujosos y exclusivos.

En otra de las imágenes muestra lo que, al parecer, es su hogar. Dentro de la casa hay una mesa de billar y un cine privado.

De igual manera, Emma es recordada por aparecer portando joyas y relojes Cartier, prendas Gucci, Louis Vuitton y Dolce & Gabanna, durante los juicios de su marido.

Coronel, que según medios mexicanos es dueña de una extraordinaria fortuna que heredó de su esposo, podría enfrentar una pena mínima de diez años de cárcel y una máxima de cadena perpetua. Si es declarada culpable del cargo criminal en su contra, tendría que pagar una posible multa de 10 millones de dólares.