Buenos Aires, 29 de marzo.- El Ejército de Colombia halló documentos de las FARC que presuntamente revelan que este grupo guerrillero ejecutó niños informantes y practicó abortos, así como supuestas pruebas de negociaciones con narcotraficantes y preparación de ataques, informó este domingo la prensa local.
Esa información se conoció al mismo tiempo que las FARC reclamaron al gobierno los restos de dos altos jefes muertos el año pasado, anunciaron que entregarán los de un policía muerto en cautiverio y reiteraron su disposición al canje de rehenes por guerrilleros presos, y un día después de que el presidente Álvaro Uribe descartara un diálogo con la organización guerrillera.
La revelación de las presuntas prácticas de las FARC fue publicada este domingo por el diario bogotano El Tiempo -de cuya propiedad tienen porciones minoritarias las familias del vicepresidente y el ministro de Defensa de Colombia, los primos Francisco y Juan Manuel Santos- y reseñada por la agencia noticiosa alemana DPA.
Esos datos están contenidos en un cuaderno en el que se registraban mensajes enviados y recibidos por el comandante de las FARC Víctor Suárez Rojas, alias Jorge Briceño Suárez o Mono Jojoy, y que el Ejército secuestró semanas atrás en unas cuevas naturales de una zona selvática del departamento (provincia) Meta.
Según El Tiempo, los informes consisten en mensajes enviados o recibidos por el líder guerrillero y estaban recopilados en cuadernos por un "radista", como llaman en las FARC a los encargados de operar equipos de comunicación.
Los militares encontraron cerca de 10 cuadernos que, de acuerdo con fuentes consultadas por el periódico, pueden contener información de valor semejante a la hallada en las computadoras decomisadas a Luis Edgar Devia, alias Raúl Reyes, segundo jefe de las FARC abatido en Ecuador el 1 de marzo de 2008.
El diario, que publica fragmentos de algunos mensajes, señala que el denominado "diario" de Mono Jojoy contiene mensajes intercambiados con otros jefes para hablar de pruebas de supervivencia de rehenes, planes de ataques y de alianzas con narcotraficantes, entre otros temas.
Menciona también un ofrecimiento del narcotraficante Víctor Patiño para entregar a las FARC cinco millones de dólares y explosivos a cambio de ayuda para dinamitar la cárcel donde se encontraba, para poder fugarse.
Asimismo, se encontraron mensajes con textos como "Investigue bien niños informantes y ajustícielos. Fusilamiento es únicamente a los que se realiza consejo de guerra" o "Junto con nuevos y correo viene mujer Robinson, 6 meses embarazo, probocarle (sic) aborto", según la publicación.
Mientras tanto, las FARC reclamaron al gobierno los restos de Reyes y de Manuel Muñoz Ortiz, alias Iván Ríos -asesinado el año pasado por un guerrillero que reclamó una recompensa por ello-, para que sus familiares puedan sepultarlos.
Las FARC efectuaron ese reclamo en una carta dirigida al grupo “Colombianos por la Paz” -que se formó el año pasado para entablar contacto con el grupo guerrillero en busca de un proceso de paz que incluya la liberación de todos los secuestrados- y citada por las agencias noticiosas ANSA y DPA.
"Quisiéramos reiterarles que estamos listos para el canje de prisioneros de guerra y en disposición de no hacer del lugar de diálogo un obstáculo insalvable, privilegiando la libertad de los prisioneros en poder de las partes contendientes", dice la organización guerrillera en la nota.
Para ello pidió que el gobierno brinde garantías a los guerrilleros conocidos con los alias Pablo Catatumbo, Carlos Antonio Lozada y Fabián Ramírez, designados como portavoces en el tema del posible canje.
Asimismo, las FARC anunciaron en la carta que entregarán a sus familiares los restos del mayor de la policía Julián Guevara, quien fue secuestrado el 1 de noviembre de 1998 y falleció en la selva en 2006, a consecuencia de una enfermedad.
Por otra parte, las FARC aseguraron que sólo tienen nueve personas secuestradas por intereses económicos y aseguraron que no son ciertas las versiones de que tienen a 3.800 personas.
Informes de la inteligencia militar han dicho que ese grupo tendría a unos 700 secuestrados. La carta fue publicada un día después de que Uribe descartara la posibilidad de entablar conversaciones con las FARC.
"¿Qué diálogo puede haber con estos bandidos que se lucen poniendo explosivos en la vecindad de las escuelas, en el camino de los niños?", dijo el presidente y agregó: "El diálogo es con la democracia, el diálogo no es con terroristas".