Cerca de 45 minutos de exposición, una hora de preguntas y respuestas , más un clima distendido marcaron ayer la intervención de la presidenta Cristina Fernández en la inauguración de la “Cátedra Argentina” en la Universidad de Georgetown, en Washington. Igual las palabras de la Presidenta despertaron en las redacciones periodísticas una incesante labor, a partir de definiciones que difícilmente podrían haber sido obtenidas por la prensa aquí, en la Argentina. Tanto la inflación y el INDEC, como la explicación al cerrojo que la Casa Rosada impone al contacto de la mandataria con los medios de comunicación tuvieron definiciones jugosas de CFK.
“Uno de los problemas más grandes” en la actual crisis económica internacional “es que no se cae una nueva idea, y si la hay es que no se la quiere ver, porque no se quieren perjudicar ciertos intereses”, disparó. Además, al responder una consulta de uno de los estudiantes por los altos niveles de inflación, la jefa de Estado señaló que “si realmente la inflación argentina fuera del 25% como algunos dicen, el país estallaría por los aires y no podríamos sostener el crecimiento ni la incorporación de millones de excluidos”.
“Hay una pregunta lógica, si realmente la inflación fuera del 25 por ciento, cómo creció la economía al 9,2 en el 2010 o al 8,9 el año pasado”, dijo. Asimismo admitió la existencia de la subida de precios, pero no “las cifras inconsistentes y absurdas que algunos publican”. Recordó que las consultoras privadas que difundieron esas cifras fueron denunciadas porque “la única estructura para hacer relevamiento de todos estos índices es precisamente el INDEC”.
A renglón seguido puso en duda la inflación de 2% anula medida en EEUU.
“Ustedes creen que la inflación es de 2 por ciento, ustedes saben cuánto es el déficit de cuenta corriente de los Estados Unidos?”, se preguntó la Presidenta, tras lo cual siguió un silencio notorio de todo el auditorio. Luego, fue más enfática y más gráfica al ahondar sus dudas sobre la inflación estadounidense y remarcó: “La expansión monetaria que han hecho los Estados Unidos para salvar al sector financiero y una tasa de inflación del 2 por ciento, es chino. ¿Es esto consistente? Si no fuera porque son los Estados Unidos ya lo tendrían que haber clausurado”.
Ante otra pregunta, acusó al FMI de ser un “árbitro a favor de los países más desarrollados que precisamente fueron los que causaron la crisis” y de llevar a cabo una “suerte de ensañamiento” contra Argentina por contradecir sus recetas.
“El FMI se ensaña con Argentina por no haber ejecutado ninguna de sus recetas, y castiga al país como quien lo hace con alumno malo”. ‘¿Dónde están las estadísticas de Grecia?, ¿eran reales? ¿Se le hizo una observación a Grecia, a España, a Italia, a Portugal?, disparó.
Si bien estaban pautadas tres preguntas de estudiantes, el buen clima que había dentro del recinto colmado por unas 200 personas y la buena predisposición de Cristina permitieron que otros tres alumnos manifestaran sus inquietudes .