Buenos Aires, 27 de diciembre.- La noticia de que un gran lobo gris suelto en las cercanías de California podría sembrar pánico entre los pobladores, pero, en cambio, la historia de OR7 conmueve a miles de personas en el mundo.

La ruta de este ejemplar de dos años es seguida con gran interés y sorpresa gracias a que lleva un collar de rastreo, colocado por un grupo de biólogos para protegerlo de cazadores furtivos cuando aún era parte de su manada.

El viaje en busca de una hembra con la que formar pareja y asentar su propio territorio empezó a principios de septiembre en el noreste de Oregon. Después de explorar los alrededores sin éxito, el animal deambuló 1221 kilómetros, hasta llegar al límite California.

Si atraviesa la frontera, se convertirá en el primer lobo en pisar ese estado desde 1924, época en la que la especie fue erradica por razones de seguridad. Por eso mismo, en caso de que OR7 se instale en California, le irá aún peor en su desafortunada búsqueda.

El lobo despertó tanta simpatía en Estados Unidos, que hasta se lanzó un concurso para bautizarlo con un nombre. Arthur, Max, Journey, Lupin y Takota son los cinco finalistas, cuyo ganador se definirá el 2 de enero.

Sin embargo, las autoridades de California están alertas, ya que se registraron algunos incidentes en granjas por un supuesto ataque, aunque los biólogos que siguen el camino de OR7 desmienten que éste haya sido el responsable. Al parecer, se mantiene impávido en su búsqueda.