El artículo 50 del Tratado de la Unión Europea es el puntal en el que se apoyará desde este miércoles la primera ministra británica, Theresa May, para iniciar la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE). El artículo permite a un Estado miembro comunicar su retirada del bloque y obliga a ambas partes a negociar en no más de dos años un "acuerdo de salida".
 

El artículo consta de cinco puntos. En primer lugar, garantiza que "todo Estado miembro podrá decidir, de conformidad con sus normas constitucionales, retirarse de la Unión Europea".
 

En segundo término, determina que si un estado decide salir de la UE, deberá comunicar su intención al Consejo Europeo. Éste, a su vez, intentará alcanzar con ese Estado un acuerdo sobre sus relaciones futuras con la Unión, previa aprobación del Parlamento Europeo.
 

El tercer punto señala que los tratados dejarán de aplicarse al Estado saliente a partir de la fecha de entrada en vigor del acuerdo de salida. En el caso de no alcanzar un acuerdo al cumplirse los dos años de la notificación, el Consejo Europeo, junto a ese Estado, podrá decidir una prórroga.
 

A su vez, el cuarto y anteúltimo punto establece que mientras dure el período de negociación las leyes de la UE seguirán siendo aplicables al país saliente, en este caso el Reino Unido. 
 

Por último, el quinto punto del artículo indica que si el Estado miembro que se ha retirado de la Unión solicita de nuevo la adhesión, su solicitud se someterá al procedimiento establecido en el artículo 49, que regula el ingreso de los nuevos Estados solicitantes.
 

Fuente: Télam