Estados Unidos, 18 de abril.- El gatito se llamaba "Tigre" y estaba perdido desde hacía dos semanas. Su dueña lo buscaba con desesperación. Pero el animal murió en manos de la asesina menos pensada: una veterinaria.
Kristen Lindsey no sólo lo mató de un flechazo a sangre fría, cuando lo vio merodeando en el jardín de su casa, sino que además, orgullosa de lo que había hecho, se sacó una foto con el cadáver y la compartió a través de Facebook.
"Mi primera muerte con arco… ‘LOL’. El único gato salvaje bueno es el que tiene una flecha atravesada en la cabeza", escribió.
