La canciller alemana, Angela Merkel, inició ayer una gira electoral de corte nostálgico, en el tren que usó en sus campañas Konrad Adenauer, 60 años atrás, y pronunciándose en contra de "experimentos políticos" y constelaciones anómalas tras las generales del próximo 27 de septiembre. Los sondeos pronostican una clara victoria de su Unión Cristianodemócrata (CDU).
