El presidente de EEUU, Barack Obama, revelará al mundo durante un discurso en cadena nacional, su nueva estrategia para la guerra en Afganistán, que ya está en marcha y que incluiría el envío de más tropas.

Considerada una de las medidas más audaces de su presidencia, y frente a cadetes de la academia militar de West Point, Obama tiene previsto anunciar el despliegue de entre 30.000 y 35.000 soldados más como parte de su nuevo plan para "terminar el trabajo" en Afganistán, según adelanta la prensa local desde hace varios días.

Ocho años después de que EEUU invadiera el país y derrocara a los talibanes por refugiar a Osama Bin Laden y a su red Al Qaeda tras los atentados del 11 de septiembre de 2001, Obama también tiene pensado presentar una estrategia de salida en su discurso de las 20 (las 22 en Argentina).

El propio oficialismo demócrata ya está poniendo condiciones -si es que no oponiéndose- a una mayor participación en una guerra cada vez más comparada con la de Vietnam, que terminó con una indigna derrota y signó la presidencia de otro demócrata, Lyndon B. Johnson, 40 años atrás.

Los sondeos muestran, además, que la opinión pública tiene una visión crecientemente negativa del conflicto, que costó al país cientos de bajas militares y onerosos recursos justo en un período de dificultades económicas con pocos precedentes.