Buenos Aires, 24 de marzo.- Los operarios estuvieron expuestos a una radiactividad de entre 170 y 180 milisievert y dos de ellos tuvieron quemaduras en sus piernas, aseguró Hidehiko Nishiyama, vicedirector de NISA.

Los empleados intentaban restablecer el sistema de refrigeración del reactor lo que permitirá evitar el recalentamiento del núcleo y las consecuentes incendios y explosiones con la fuga de material radioactivo a la atmósfera.

El portavoz del gobierno de Japón, Yukio Edano, dijo que los trabajadores habían estado con las piernas en agua contaminada con radiactividad, según difundió la agencia DPA.

Estos tres operarios, que se suman a otros 17 que ya sufrieron una radiación superior a los 100 milisievert, no tuvieron mareos ni dolores pese a la gravedad de su estado, destacó la agencia local Kyodo.

Edano destacó que se darán instrucciones a los demás trabajadores "para que no cometan el mismo error" mientras las autoridades elevaron de 100 a 250 milisievert por año la dosis máxima de radiación permitida para los trabajadores de las centrales nucleares.

Los seis reactores de la central nuclear de Fukushima resultaron seriamente afectados por el terremoto y posterior tsunami que devastó el norte de Japón el 11 de marzo pasado y causó cerca de 9.800 muertos mientras 17.500 personas siguen desaparecidas, según las últimas cifras.

Explosiones e incendios comenzaron a registrarse en la central a causa del recalentamiento del núcleo de los reactores debido a que quedaron fuera de servicio los sistemas de refrigeración.

El gobierno japonés ordenó al evacuación de la población en derredor de Fukushima ante la fuga de material radioactivo, mientras ya se comenzaron a detectar alimentos, leche y agua contaminada en torno a la central nuclear.

La empresa operadora de Fukushima I, Tepco, retiró a algunos trabajadores del reactor 3 después de conocerse la exposición de los tres operarios a dosis elevadas de radiactividad.

Pese a esto, los técnicos comenzaron con los preparativos para reparar el sistema de bombeo y refrigeración, anunció la emisora de televisión NHK en base a informes de Tepco.

En tanto, la presencia de yodo radiactivo en el agua potable en la capital de Japón bajó nuevamente a los valores permitidos para un bebé, informaron autoridades de NISA.

El gobierno japonés había recomendado no dar de beber agua potable a bebés y niños menores de un año debido a la elevada radiactividad por lo que ya casi no quedaban botellas de agua mineral en Tokio.

En la ciudad de Fukushima, a 75 kilómetros de la central nuclear, se registró un nivel de radiación de 5,43 microsieverts por hora, según informó la emisora NHK.

"En base a la situación actual no debemos ser demasiado optimistas", dijo Edano en una conferencia de prensa en Tokio al hacer referencia al reactor 1 en donde hoy se registró un aumento de la temperatura.