Una asamblea de obispos católicos propuso ayer que se permita que hombres casados de la Amazonía puedan ser ordenados sacerdotes, lo que podría generar un cambio histórico respecto al celibato en la Iglesia.

La propuesta, presentada en un documento final tras una reunión de tres semanas conocida como sínodo, fue aprobada por 128 votos a favor y 41 en contra. El Papa Francisco ahora considerará la iniciativa, junto con muchos otros temas entre los que también está el ambiental.

Uno de los puntos más polémicos del extenso documento final del sínodo es la propuesta para que hombres casados que ya son diáconos y que son líderes de sus comunidades puedan ser ordenados sacerdotes, aunque destaca que el proceso tendría que ser precedido por una "formación adecuada". Los habitantes de al menos el 85% de las aldeas amazónicas no pueden asistir a misa semanalmente y algunos no pueden hacerlo durante años.

Los sectores más conservadores se oponen al cambio, ya que temen que provoque que los sacerdotes terminen casándose.