El Parlamento holandés otorgó una autorización especial para que la argentina Máxima Zorreguieta sea reina consorte de esa nación cuando su marido, el príncipe Guillermo, acceda al trono, según publicó ayer la prensa de ese país.
Por amplia mayoría, el Parlamento holandés autorizó a la argentina a convertirse en Reina de Holanda una vez que su marido abandone el título de príncipe.
Hasta ahora los cónyuges de los soberanos holandeses alcanzaban el título de príncipes, como el príncipe Claus, marido de la actual reina Beatriz o el príncipe Bernardo, cónyuge de la reina Juliana. Sin embargo, la mayoría de los parlamentarios entendió que no tiene sentido en la actualidad que los consortes no compartan el título de sus esposas o maridos.
Según informó ayer el periódico holandés "De Volkskrant", una mayoría del parlamento holandés, en La Haya, considera que la argentina podrá, llegado el momento, en caso de posible abdicación de la reina Beatriz, llevar el título de "reina de los Países Bajos".
La iniciativa se concretó pese a la oposición del partido del Trabajo (Pva, socialdemócrata), los ecologistas de Groenlinks y el Partido de los Animales (Partij van de Dieren, que aboga por el derecho de los animales), quienes se resistían a que, una vez que Guillermo-Alejandro asumiera el trono, Máxima se convirtiera en reina.
Una mayoría del parlamento, con el respaldo decisivo de los partidos en el gobierno VVD, liberal de derechas, y el democristiano CDA, logró que sea una realidad la posibilidad de convertir en reina a Máxima.
El problema se planteó desde los partidos de izquierda que consideran "anacrónico" que la esposa de un rey se convierta, de forma automática, en soberana de un país. No obstante, los precedentes a favor de Máxima son apabullantes.
Las esposas de los reyes Guillermo I, II y III en el siglo XIX se convirtieron automáticamente en reinas de Holanda. Se da la curiosa circunstancia de que esta tradición tiene también un reverso de la moneda: los maridos de las reinas Guillermina (príncipe Hendrik), de Juliana (príncipe Bernardo), y de la actual reina Beatriz (príncipe Claus) ejercieron de "príncipes" y no de "reyes de Holanda", recuerda el diario de Amsterdam.
A punto de cumplir diez años como princesa holandesa, Máxima es el miembro más popular de la familia real de Holanda. Con su espontaneidad latina ha sabido ganar el corazón de los holandeses, que la vieron llorar la ausencia de sus padres el
día de su matrimonio.
Los Zorreguieta no acudieron a la boda de su hija, celebrada el 2 de febrero de 2002, porque el Parlamento holandés decidió que ésa era la respuesta más salomónica a las críticas que Máxima recibió por ser hija de un antiguo ministro del régimen militar de Jorge Rafael Videla en Argentina.
A poco de cumplir 40 años, tuvo tres hijas con el príncipe. Nacida en el porteño Barrio Norte, el 17 de mayo de 1971, Máxima forma parte de una familia de clase alta. Se educó en su ciudad natal, donde cursó Bachillerato en el colegio bilingüe Northlands, que finalizó en 1988. A continuación estudió Ciencias Económicas en la Universidad Católica Argentina, donde se graduó en 1995. Completó su formación con un Máster en Boston, Estados Unidos.
Habla español, inglés, italiano y holandés. Durante su época de estudiante trabajó en diversas empresas, además de dar clases de inglés y matemáticas.
Se sabe que conoció a Guillermo en 1999 en una fiesta en Sevilla, España y comenzaron a salir hasta que se casaron el 2 de febrero de 2002. Máxima reconoce que nunca soñó con ser princesa y cree que su vida no cambiará cuando su esposo suba al trono.