Las compañías aéreas podrían subir hasta un 5,2% sus tarifas este año en un intento de recuperarse de las pérdidas sufridas por la paralización de los vuelos tras la erupción del volcán islandés. Entre 1.500 y 2.500 millones de euros se estima que las pérdidas por el cierre del espacio aéreo que provocó la nube de cenizas.