La teletransportación, uno de los avances de la tecnología más abordados por la ciencia ficción, ha logrado avances cruciales en los últimos meses.

El pasado mes de junio, un equipo de científicos chinos logró la teletransportación cuántica de una partícula en una distancia récord: 1.200 kilómetros.

Sin embargo, esta vez el mismo grupo de investigadores superó su propia marca y consiguió la primera teletransportación de un fotón a un satélite en órbita.

Según reveló el área Technology Review del MIT, todos estos experimentos forman parte del proyecto Micius, que logró poner un satélite en órbita geosincrónica, capaz de generar, detectar y emitir pares entrelazados de fotones.

La gran diferencia entre la teletransportación cuántica y aquella que vemos en la ciencia ficción, es que no es capaz de desplazar materia o energía.

Se basa en un fenómeno que se conoce como entrelazamiento cuántico, propiedad de algunas partículas subatómicas como las bosónicas (fotones, gluones y piones).

El vínculo de dos de estas partículas le permite compartir propiedadesindependiente de la distancia y, si una se altera, la otra la imita.

Para lograr aquello, los científicos se trasladaron a una estación situada en la cordillera del Himalaya, a cuatro mil metros de altura, para minimizar las interferencias de la atmósfera.