Una nueva fórmula de un medicamento para evitar la hemorragia post parto podría salvar miles de vidas en los países de bajos y medios ingresos, según un estudio de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

"Durante años, la comunidad médica buscó un medicamento que no fuera susceptible al calor, que se mantuviera estable y efectivo a altas temperaturas, y ahora tenemos un candidato", afirmó Metin Gulmezoglu, coordinador de salud materna de la OMS.

"Los resultados del estudio no podrían ser mejores. Tenemos la oportunidad de salvar decenas de miles de vidas en los países más pobres", agregó el experto.

El nuevo medicamento se llama "carbetocin-a temperatura estable" y está formulado de tal forma que puede soportar temperaturas de hasta 30 grados centígrados y 75% de humedad relativa sin estropearse durante tres años, un aspecto clave para que pueda usarse en zonas deprimidas y sin acceso a un refrigerador.

Para luchar contra la hemorragia post parto se ha usado tradicionalmente la oxitocina, pero este fármaco debe ser mantenido a una temperatura estable de entre 2 y 8 grados centígrados tanto cuando se transporta como cuando se almacena, algo que es eminentemente imposible en muchos países en desarrollo.

"A altas temperaturas la oxitocina se degrada, no es que tenga efectos nocivos, sino que simplemente no es eficaz. Hemos visto lugares donde se inocula tres veces la dosis necesaria como método para equilibrar la falta de eficacia", explicó Gulmezoglu.

Cada año fallecen 70.000 mujeres en el mundo a causa de la hemorragia post parto, y tras el deceso de la madre, se incrementa considerablemente el riesgo de que sus recién nacidos también mueran.

Dados los resultados del estudio, la OMS cree que en septiembre estará en condiciones de recomendar el uso del "carbetocin-a temperatura estable" como método para evitar la hemorragia post parto. Ambas moléculas (la oxitocina y el carbetocin) son muy parecidas, por eso tienen efectos muy similares, sólo que el nuevo fármaco no es susceptible al cambio de temperatura.

"La idea es recomendarlo como un método preventivo, no como un tratamiento, porque se ha demostrado que si se inocula el producto a la madre entre en los primeros minutos tras el parto, se reduce entre un 40 y un 50 por ciento las posibilidades de padecer una hemorragia", explicó Gulmezoglu.

Actualmente, la OMS recomienda inocular con oxitocina a todas las mujeres tras el parto, algo que no cambiará con la llegada del nuevo remedio.