Cubas, 26 de febrero.- El mandatario bolivarino fue sometido en las últimas horas a exámenes médicos en La Habana, donde se le practicará una cirugía para extirparle una nueva "lesión" en la misma zona en que se le extrajo un tumor canceroso en 2011.
Chávez arribó la noche del viernes y fue recibido en el aeropuerto de La Habana por su amigo y homólogo Raúl Castro, "en cuyo abrazo de bienvenida llegó también el de todos los cubanos", señaló un comunicado oficial publicado en la primera plana del diario oficial Granma.
Chávez, de 57 años, viajó acompañado por sus "ministras de Salud y de la Presidencia, Eugenia Sader y Érika Farías" y "por su hermano Adán Chávez, gobernador del Estado de Barinas".
"Aquí estamos llenos de fe y esperanza en que todo va a salir bien", dijo a Chávez, al recordar que se sometería a "exámenes" y a los preparativos para la cirugía, que será practicada el "lunes o martes" próximos, tras habérsele detectado una "lesión" en la misma zona donde le extrajeron un tumor el 20 de junio de 2011, también en la capital cubana.
Chávez, que nunca ha revelado en qué lugar le detectaron aquel tumor ni qué tipo de cáncer contrajo, anunció que la ministra Sader ejercerá a partir de ahora como su vocera para informar sobre la cirugía y la evolución del "tratamiento" que le realizaran en la isla.
Llamativamente, el mandatario eligió hablar con cierta soltura de este nuevo problema en los últimos días, a diferencia del hermetismo que guardó a propósito de su operación por el tumor. Eso condujo nuevamente a especulaciones sobre la gravedad de su salud, cuestión que despertó temores sobre su candidatura. En ese contexto, analistas estimaron que será difícil para el oficialismo encontrar un sustituto al presidente para las elecciones, debido a que el socialismo venezolano construyó un personalismo sobre su figura.
