Rusia, 26 de abril.- El presidente ruso, Vladímir Putin, abogó por modificar los acuerdos bilaterales en materia de adopciones con Francia y otros países en relación con la reciente aprobación en aquel país del matrimonio homosexual.

"Debemos reaccionar ante lo que ocurre a nuestro alrededor. Nosotros respetamos a nuestros socios, pero pedimos que respeten nuestras tradiciones culturales y éticas, y las normas legales y morales de Rusia", dijo Putin.

Putin respondió así a la propuesta presentada por la presidente de la asamblea del enclave báltico de Kaliningrado, Maria Orguíeva, quien pidió modificar el acuerdo con Francia para que los niños rusos no sean adoptados por parejas del mismo sexo.

"Tiene razón. (…) Considero que tenemos motivos para introducir cambios en el citado documento. El asunto es de actualidad, hay que pensar sobre ello", agregó el líder ruso. El acuerdo bilateral con Francia fue suscripto en noviembre de 2011 y ratificado en julio del año pasado por el propio jefe del Kremlin.

El Parlamento ruso, en una ley firmada por Putin, ya había desencadenado un escándalo al prohibir la adopción de niños rusos por familias estadounidenses. Esa ley fue adoptada, en parte, como una represalia por una legislación relativa a los derechos humanos adoptada por los parlamentarios norteamericanos.

Rusia despenalizó la homosexualidad en 1993 y oficialmente la eliminó de la lista de trastornos psiquiátricos en 1999, pero la homofobia está muy generalizada y casi ninguna personalidad pública ha confesado ser gay. Putin se enorgullece de tener una imagen viril y claramente heterosexual.