Los griegos han enviado un ‘No‘ rotundo a Europa al rechazar con una amplia mayoría la propuesta presentada por los acreedores y sobre la que se expresaron en el referendo celebrado ayer en Grecia.

Tras conocerse los primeros resultados, los miembros del Gobierno coincidieron en afirmar que la victoria del ‘No‘ fortalece la posición del Ejecutivo en las negociaciones, ya que envía el mensaje a Europa de que los griegos desean un mejor acuerdo que ofrezca nuevas perspectivas de futuro.

En este sentido, el primer ministro, Alexis Tsipras, afirmó en un discurso ante una muchedumbre exultante en la plaza Syntagma de Atenas que en el referendo los griegos habían planteado que querían una Europa de solidaridad y democracia, lo que ‘alterará el diálogo que está en marcha‘ con los acreedores.‘El pueblo griego‘, afirmó, ‘respondió a la verdadera cuestión en juego: ¿Qué clase de Europa queremos?‘, y la respuesta fue ‘Una Europa de solidaridad y democracia‘. La ‘histórica y valiente‘ respuesta griega, agregó, ‘alterará el diálogo que está en marcha‘, porque no es ‘un mandato para romper con Europa sino para darme más capacidad de negociación‘. Además, aseguró que su Gobierno reiniciará hoy las negociaciones con los acreedores para tratar de alcanzar un acuerdo con las instituciones y señaló que la prioridad es la reapertura de los bancos.

Con el 90 % de los votos escrutados, el ‘No‘ se ha impuesto con el 61,42 % frente al Sí que ha obtenido el 38,58 %, un reflejo de que el pueblo heleno ha dado la espalda a las políticas de austeridad.

La participación superó el 62 %, muy por encima del 40 % que exigían las normas para que el resultado fuese considerado válido. Una de las peculiaridades de este referendo es que se ha celebrado bajo la imposición de un control de capitales que dura ya una semana. Tsipras añadió que en esta ocasión entrará en la negociación la reestructuración de la deuda, una necesidad que, dijo, incluso ha reconocido el Fondo Monetario Internacional, que forma parte junto con la Comisión Europea y el Banco Central Europeo de las instituciones acreedoras. Y expresó su confianza,en una solución al problema de liquidez de la banca y afirmó que el Banco Central Europeo ‘se da cuenta de la dimensión humana de la crisis‘.