Illinois se convertirá en el decimosexto Estado de EEUU en abolir la pena de muerte, gracias a una ley firmada por el gobernador Pat Quinn, en la que además conmuta la condena a muerte de 15 presos por prisión de por vida.
"Queridos ciudadanos, no podemos escapar de la historia. Considero que es lo correcto abolir la pena de muerte", explicó a los periodistas en Springfield, la capital estatal, tras ratificar la ley, que entrará en vigor el próximo 1 de julio.
Quinn, demócrata, argumentó en un comunicado que "la experiencia nos ha mostrado que no hay manera de diseñar un sistema de pena capital perfecto, libre de numerosas fallas que pueden conducir a sentencias erróneas y tratamiento discriminatorio".
La firma del gobernador era el último requisito para la abolición formal de la pena de muerte en el estado tras la aprobación de la medida por el Senado de Illinois con 32 votos a favor y 25 en contra a comienzos de enero de este año.
"Fue una decisión difícil, literalmente una opción entre la vida y la muerte", dijo el gobernador.
La decisión se produce casi 11 años después de que el entonces gobernador republicano de Illinois George Ryan (1999-2003) declarara una moratoria en las ejecuciones, tras revelarse errores en las condenas de 13 personas.
En 1972, la Corte Suprema de los Estados Unidos anuló la pena de muerte en 40 estados, incluyendo Illinois.
Cinco años después, la pena capital fue reinstalada en este estado, donde se produjeron 12 ejecuciones antes de la declaración de moratoria de 2000.
El último ejecutado por inyección letal en Illinois fue el asesino en serie Andrew Kokoraleis, en 1999.
En la actualidad, 34 Estados mantienen vigente la pena capital, con 3.261 reos en los corredores de la muerte.