Un acto de repudio por el 47 aniversario del golpe de Estado contra el gobierno socialista de Salvador Allende, comandado por el dictador Augusto Pinochet, terminó hoy en medio de incidentes y detenciones frente al Memorial del Detenido Desaparecido y el Ejecutado Político, en el Cementerio General de Santiago.

Un centenar de personas de agrupaciones de víctimas de la dictadura cívico-militar que gobernó Chile entre 1973 y 1990, liderados por la Agrupación de Familiares de Ejecutados Políticos (AFEP), marcharon esta mañana desde Plaza de los Héroes hasta el Cementerio santiaguino, donde se ubica el impresionante memorial con el nombre de Salvador Allende destacado entre las 3.000 placas.

Ese fue el escenario de los primeros enfrentamientos entre los manifestantes y los Carabineros (policía) que los dispersaron tras dos horas de confrontación, con la ayuda de un carro hidrante, y donde quedaron detenidas seis personas.

En tanto, en el centro de la ciudad, marcharon diversos partidos políticos para conmemorar la fecha en que se interrumpió el orden democrático.

Participaron, entre otros, el Partido Comunista de Chile (PC), Partido Por la Democracia (PPD) y el Partido Socialista de Chile (PS), cuyos militantes dejaron sus respectivas ofrendas florales a los pies de la estatua de Salvador Allende de la Plaza de la Constitución, ubicada frente al gubernamental Palacio de la Moneda, donde el presidente socialista se suicidó ante la inminencia de la caída de su gobierno a manos de los golpistas.

También participaron de este acto distintas agrupaciones de víctimas de la dictadura, entre ellos, la Central Unitaria de Trabajadores.

“Este es un día triste para nuestro país, recuerda uno de los episodios más dramáticos de nuestra historia”, manifestó a CNN el presidente del Partido Socialista, Álvaro Elizalde.

Adicionalmente, el movimiento feminista Coordinadora 8M, convocó a una manifestación en Plaza Baquedano desde las 17 horas y dos horas después están programados un homenajes con velas (velatones) en el Barrio República, Plaza Brasil, Panamá y Plaza Yungay, en el centro de la capital.

Con un espíritu antagónico, se programó un acto conmemorativo de simpatizantes con la dictadura pinochetista frente de la Escuela Militar.

En el mediodía de hoy, el presidente Sebastián Piñera dijo en un mensaje a la nación que “hoy recordamos esa ruptura de nuestra democracia, no para revivir viejas divisiones y odiosidades, no para repetir los errores del pasado, sino para aprender las lecciones y enseñanzas de nuestro pasado y guiar e iluminar los caminos del futuro”.

El mandatario recordó que dentro de 44 días se llevará a cabo el plebiscito, pidiéndole a la población “informarse, comprometerse y participar en forma responsable y pacífica” de cara a la consulta popular.

El próximo 25 de octubre se realizará el plebiscito constitucional, una consulta popular donde los chilenos podrán decidir si quieren tener una nueva constitución o no, y elegir bajo qué mecanismos modificarla.

Piñera resaltó que su administración ha “asumido en forma pública y transparente frente a los chilenos” para organizar un plebiscito “transparente, informado, participativo y seguro”, y “que haga honor a nuestra hermosa tradición democrática”.

Asimismo, aseguró estar comprometido a “avanzar hacia una Constitución que recoja y promueva los valores más profundos de la sociedad chilena, que recoja y resguarde los principios democráticos de nuestra tradición republicana, y que incorpore y proteja los derechos fundamentales de los ciudadanos”.

El jefe de Estado reflexionó al señalar que “una casa dividida no puede prevalecer. Un país dividido no puede avanzar. Nunca debemos olvidar que es mucho más lo que nos une de lo que nos separa”.