Finalmente llegó Stella, la tormenta de nieve que azota y cubre todo el norte de la costa atlántica de Estados Unidos. Muy cerca del comienzo de la primavera, la última gran tempestad de la temporada paralizó casi por completo Nueva York, donde grandes cafeterías y comercios debieron colgar el cartel de "cerrado". A su vez, el transporte público funciona con servicio reducido al mínimo y las aerolíneas cancelaron más de 5.400 vuelos en los aeropuertos de Nueva York, Washington y Boston.

Esta es la más fuerte del invierno. Según el Servicio Meteorológico Nacional, supera ampliamente a las otras dos intensas tormentas de nieve que se presentaron a comienzos de enero y hace un mes.

La imagen dominada por el blanco y con calles sin tráfico en pleno Nueva York, cuyas autoridades decidieron el cierre de todos los comercios, era un calco a la que se vio más hacia el centro del continente en Chicago.

Sin embargo, se prevé que el grueso de la tormenta invernal, apodada Stella y causada por el choque de dos sistemas de bajas presiones, haya pasado, y la situación comience a mejorar paulatinamente en los próximos días.

A pesar de esto, el latigazo invernal retrasado sorprenderá a los primeros brotes de la primavera y en la capital de Estados Unidos, según el Servicio Nacional de Parques, se podría perder un 90% de su celebre floración de cerezos.