A casi cinco años de la tragedia, nuevas revelaciones se suman a la investigación del accidente de Chapecoense. En las últimas horas, la Policía Federal de Brasil detuvo a la ciudadana boliviana Celia Castedo Monasterio, investigada por la catástrofe aérea ocurrida el 28 de noviembre de 2016, en la que murieron 71 personas, entre futbolistas, preparadores y directivos del club.

La Policía de Corumbá, ciudad fronteriza con Bolivia situada en el estado de Mato Grosso do Sul, anunció que la mujer fue responsable del análisis y aprobación del plan de vuelo del avión donde se movilizó el Chapecoense y era buscada por la Justicia de su país.

Castedo Monasterio fue funcionaria de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación Aérea de Bolivia (AASANA) y tras la tragedia ocurrida en Colombia dijo haber recibido “presiones y hostigamiento” por parte de sus superiores.

“La mujer boliviana era especialista en seguridad de vuelo y, en su momento, habría dejado, fraudulentamente, de observar los requisitos mínimos de procedimiento para la aprobación del plan de vuelo de la aeronave, ya que en el programa presentado, la autonomía de vuelo no era adecuada para el viaje”, explicó la Policía Federal.

Así fue el accidente del Chapecoense

La tragedia ocurrió cerca de la ciudad de Medellín cuando el avión en el que viajaba el Chapecoense se estrelló a 17 kilómetros del aeropuerto José María Córdova al quedarse sin combustible. El equipo se dirigía a Colombia para jugar ante el Atlético Nacional la final de la Copa Sudamericana 2016.

En la tragedia murieron 71 de las 77 personas que se encontraban en la aeronave de la aerolínea boliviana Lamia. Sobrevivieron tres futbolistas, dos tripulantes y un periodista.

La mujer permanecerá detenida en la ciudad de Corumbá, en Mato Grosso mientras se realizan los trámites legales para su entrega a las autoridades bolivianas.

Qué es de la vida del “niño ángel”, el héroe de la tragedia de Chapecoense

Ese día está grabado a fuego en la memoria del deporte como uno de los más oscuros de la historia. De aquel momento también quedó el recuerdo del “niño ángel”, un chico de la zona que ayudó a los rescatistas para que pudieran llegar hasta los restos del avión en medio de la angustia. Su aporte resultó como una aparición milagrosa entre tanto dramatismo.

Johan Alexis Castro, que en ese momento tenía 15 años, recibió el apodo del “niño ángel” porque desapareció de la escena. No se supo nada de él por más de un mes. Nadie sabía cómo se llamaba ni cómo había llegado hasta ahí. Solo tiempo después se supo que vivía en la zona junto a su familia y que conocía cada detalle del cerro.

A partir de ese momento, Johan pasó a ser reconocido como un héroe. Por su aporte viajó por el mundo, donde recibió el reconocimiento de estrellas del fútbol y decenas políticos. Además, se le empezaron a abrir oportunidades en la vida: en septiembre de 2020, cuando habilitaron los vuelos internacionales en su país, partió a Estados Unidos para cumplir el sueño de estudiar inglés, mientras que también cursa ingeniería industrial en la Universidad Católica de Oriente, Antoquia.

Por su aporte, Johan también recibió una casa, donde vive junto a su papá Miguel, su mamá Miriam y su hermana Jéssica. Pudo conocer el estadio del Real Madrid, viajar en avión y visitar Chapecó, ciudad donde fue recibido con honores: “Yo no les entendía mucho el portugués pero les escuchaba ‘obrigado’ y sabía que me estaban agradeciendo. Pero lo más bonito de todas las personas de Chapecó fueron los abrazos, sentía un cariño puro”.