En una nueva medida contra los migrantes, el gobierno de Donald Trump propuso negar la residencia permanente a los inmigrantes que se benefician de políticas públicas como bonos de alimentación o cupones para vivienda, informó el Departamento de Seguridad Interior (DHS).

Trump prometió durante la campaña de 2016 hacer más difícil la inmigración a Estados Unidos, así como reducir el número de personas a las que se les permite permanecer en el país.

El DHS dijo que según la nueva propuesta ser un actual o antiguo receptor de ciertas ayudas públicas sería estimado como "un factor de peso altamente negativo" para obtener la residencia permanente (conocida como green card).

"La reglamentación propuesta instrumentará una ley aprobada por el Congreso que busca promover la inmigración autosuficiente y proteger los recursos finitos asegurando que no se conviertan en cargas para los contribuyentes estadounidenses", dijo la secretaria de Seguridad Interior, Kirstjen Nielsen.

Ya se solicita a los inmigrantes que solicitan la green card que prueben que no se convertirán en "una carga pública", considerando los recibos de beneficios en dinero. Pero la nueva norma incluye un amplio espectro de beneficios públicos no monetarios que podrían ser descalificadores, como bonos de alimentación, cupones para vivienda y descuentos en las recetas de medicamentos por bajos ingresos.

El DHS dijo que la normativa afectaría a poco más de 382.200 inmigrantes que aspiran a ser residentes permanentes cada año.