Buenos Aires.- Ser una persona con enanismo y querer conducir son dos conceptos difíciles de reunir. La única solución para que estas personas puedan conducir consiste en realizar una gran cantidad de modificaciones en el interior del coche, incluyendo un sistema de aceleración y frenado accionable desde el volante, que cuesta una gran cantidad de dinero, que en muchos casos puede resultar inasumible para la persona interesada.
La división brasileña de Volkswagen han pensado en este colectivo y ha presentado un curioso prototipo, que básicamente es un Volkswagen Gol reducido un 30% en tamaño. Como se puede ver, la reproducción es muy fiel al Gol original, que es uno de los modelos más populares del país y fue desarrollado por la propia filial brasileña pensado según los gustos de los clientes de esa zona.
Al margen de la enorme utilidad que este coche pueda tener para las personas a las que va dirigido, es innegable que tiene cierto atractivo para todos.
De hecho, es probable que sólo se quede en eso puesto que tan sólo es un coche de exhibición sin ninguna intención de llegar a producción. No sólo no sería rentable para la compañía sino que sus peculiares características harían imposible que superara las homologaciones pertinentes, a no ser que se acogiera a algún tipo de legislación especial para ofrecer coches adaptados a personas enanas.