El presidente de Egipto, Hosni Mubarak, celebró ayer la primera reunión con su nuevo Gabinete, casi dos semanas después de que multitudinarias protestas contra el régimen que lleva 30 años en el poder forzaron la disolución del anterior equipo de ministros.

Mientras tanto, miles de personas volvieron a las calles para reclamar la renuncia del mandatario, de 72 años. Mubarak se reunió con Omar Suleiman, el primer vicepresidente egipcio en 30 años, y otros miembros del gobierno, en un encuentro en el que también participó el nuevo ministro del Interior, Majmud Wagdi.

El 28 de enero, luego de tres días de protestas, Mubarak ordenó el cese en pleno de su Gobierno con el propósito de calmara el reclamo popular. Con el objetivo de tranquilizar la situación en el país, el nuevo gobierno egipcio presentó al Parlamento una propuesta de ley para subir los salarios de los funcionarios en un 15 por ciento, informó la agencia italiana ANSA.

La propuesta fue hecha por el comité jurídico del nuevo Ejecutivo de Ahmed Shafik, pero el Parlamento no está activo ya que Mubarak determinó que se investiguen primero todas las quejas por supuestas manipulaciones durante los comicios parlamentarios de noviembre.