Wall Street superó los temores que había generado el paso del huracán Irma por Florida (EEUU), que causó menos daños que los esperados, y se anotó ayer fuertes alzas y un nuevo récord.

El S&P 500, el índice preferido por muchos operadores, renovó la marca histórica que arrastraba desde el 7 de agosto al cerrar ayer con un avance de 1,08% y anotarse un nuevo récord, de 2.488,11 puntos.

Estuvieron cerca de renovar sus propias marcas históricas el Dow Jones de Industriales, que terminó con un avance de 1,19%, hasta 22.057,37 unidades, y el índice compuesto del mercado Nasdaq, que subió 1,13%, hasta 6.432,26 enteros.

Los destrozos que ocasionó Irma al castigar Florida, cuando el país aún se está recuperando de la devastación originada por el paso del huracán Harvey por Texas, habían despertado temores de que

habría efectos graves en el ánimo del parqué neoyorquino. Pero no ha sido así y, otra vez, a Wall Street le ha costado poco tiempo superar esos miedos.

Según la analista del grupo JPMorgan Sarah DeWitt, se esperaba que Irma fuera uno de los cinco huracanes que mayores daños causara en la historia de Estados Unidos. Sin embargo, "las pérdidas podrían estar en línea o ser menores de lo que esperaba el mercado", agregó DeWitt.

"Irma fue duro, pero parece que no fue tan malo como se esperaba", dijo, por su parte, Randy Frederick, vicepresidente de la firma financiera Charles Schwab.

Según datos del sector, Irma puede haber causado daños de entre 20.000 y 40.000 millones de dólares, y las apuestas están hacia el lado más bajo de ese rango. Ninguno de los sectores escapó al buen ánimo bursátil de ayer, que coincidió con un ligero repunto en los precios del petróleo de Texas. El sector financiero se apuntó la mayor subida, de 1,40%, y le siguió, de cerca, el tecnológico, que avanzó 1,30%. Travelers, la única aseguradora del grupo del Dow Jones, se apuntó una ganancia de 2,34%.