Los equipos de rescate localizaron a ocho personas con vida en el hotel italiano que fue sepultado ayer por un alud de nieve, según confirmó el portavoz de los bomberos Luca Cari. "Están vivos y les estamos hablando", afirmó Cari a la agencia Reuters. Los bomberos han hablado en varias ocasiones con los supervivientes, que están en la zona del tejado.

Las posibilidades de encontrar supervivientes en el hotel, 43 horas después de la avalancha, se reducían cada hora, mientras decenas de socorristas continúan trabajando sin descanso. Se estimaba que entre 25 y 30 personas (entre clientes y empleados) estaban atrapados en el hotel Rigopiano, un edificio de cuatro plantas pegado a las faldas de la montaña.

Desde el jueves por la mañana se habían extraído tres cadáveres en el lugar de la tragedia, en Farindola, los Abruzos. También habían sido hallados dos supervivientes, que habían salido del hotel poco antes del alud.

Dos helicópteros sobrevuelan la zona para trasladar lo más rápido posible a los supervivientes, todavía están bajo los escombros, a Pescara, la principal ciudad de la región. Los equipos de emergencia continúan retirando montañas de nieve, ramas y rocas bajo las que ha quedado sepultado este establecimiento de cuatro estrellas situado cerca de los Apeninos.