El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, consideró “imposible” que Ucrania se quede con Crimea y entre a la OTAN, según sus últimas declaraciones a medios de su país.
El mandatario señaló que para Rusia esa fue una línea roja “mucho antes” de la llegada al poder del actual líder del país, Vladímir Putin, según lo que conversó durante una entrevista con Fox News.
Trump destacó que unas de las causas principales del conflicto entre Rusia y Ucrania fue el deseo de esta última de recuperar el control de la península de Crimea, así como de entrar en la Alianza Atlántica.
“Bueno, ambas cosas son imposibles porque, repito, mucho antes de Putin, Rusia, la Unión Soviética o como se quiera llamar, lo prohibían. Es algo parecido a medida que crece, pero muy parecido. Pero siempre fue un no, no. No se podía, Rusia dijo que no quería, al supuesto oponente o enemigo, usemos ese término, no los queríamos en nuestra frontera. Y tenían razón”, explicó.
El mandatario estadounidense continuó: “No obstante, desde Kiev siguieron insistiendo y pidieron a Estados Unidos la adhesión de Ucrania en la OTAN. Y todos sabían que no se podía. Simplemente no se puede hacer eso”.
“[Los rusos] nunca lo habrían aceptado. Esto fue antes de Putin. Esto fue mucho antes de Putin. Esto fue simplemente un no, no”, insistió.
“Así que ellos no van a ser parte de la OTAN”, redondeó Donald Trump.
Si bien el norteamericano se mostró seguro acerca de esta cuestión clave para que Rusia llegue a un acuerdo de paz con Kiev, entiende que “hay naciones europeas que insisten en la membresía de Ucrania en el bloque”, lo que motivó su reflexión.
“Creo que Putin está harto [de ello]”, comentó el primer mandatario de los Estados Unidos, en declaraciones que este martes repercutían en los medios rusos Actualidad RT y Sputnik News.
Por qué es clave la península de Crimea para llegar a un acuerdo
La península de Crimea, una región estratégica por su acceso al mar Negro, fue anexada por Rusia en 2014 tras un controvertido referéndum no reconocido por la comunidad internacional y motivo histórico de disputa entre Rusia y Ucrania.
Ahora parece ser una de las claves para el fin de la guerra entre ambos países si los ucranianos desisten de querer recuperar ese territorio.
Con una superficie de 26.000 kilómetros cuadrados y limitando con Ucrania y el mar Negro, Crimea ha sido parte ucraniana o rusa durante diversas etapas históricas. A partir del tratado de 1654 y durante más de 300 años Crimea se incorporó a Rusia, al igual que entre 1921 y 1945 (también fue ocupada por la Alemania nazi en la II Guerra Mundial), pero en 1954 volvió a Ucrania, aunque dentro de lo que entonces era la Unión Soviética.
La Coalición de Voluntarios aliados de Ucrania coordinará con Estados Unidos el plan de seguridad para poner límites a Putin
FILE PHOTO: A view shows the Crimean Bridge, a section of which was damaged by an alleged overnight attack, as seen form the city of Kerch, Crimea, July 17, 2023. REUTERS/Alexey Pavlishak/File Photo
Tras la caída del régimen soviético, en 1991, se produjo la independencia de Ucrania y Simferopol se convirtió en capital de la República autónoma de Crimea.
Crimea pasó a ser un estado autónomo el 5 de mayo de 1992, después de que 118 diputados de los 167 de su Soviet Supremo proclamaran la independencia, en una decisión que fue ratificada en referéndum popular el 20 de mayo del mismo año.
En 1997 Rusia y Ucrania firmaron el Tratado de Amistad y Cooperación, que incluyó un acuerdo para permitir a Rusia acceder a la base de Sebastopol (está establecida la flota del mar Negro para el tránsito militar hacia los Balcanes y Oriente Próximo) durante más de dos décadas, a cambio de respetar la integridad territorial de Ucrania.
En 2010 el citado acuerdo de cesión validó el permiso a Rusia hasta el año 2042, pero después de que Crimea pasara a formar parte de Rusia en 2014 el presidente Putin revocó por ley los acuerdos con Ucrania sobre la flota de Sebastopol.

