La oposición republicana ganó los gobiernos de al menos 11 Estados que estaban en manos del oficialismo como parte de su amplio triunfo en las elecciones de mitad de mandato en EEUU, aunque el Partido Demócrata recuperó dos gobernaciones y mantuvo otro clave.
Con algunos Estados de resultado aún incierto, los republicanos vencieron en Kansas, Oklahoma, Tennessee, Pensilvania, Michigan, Wyoming, Ohio, Nuevo México, Maine, Wisconsin y Iowa, pero perdieron en California y Hawai a manos del Partido Demócrata, que además conservó Nueva York, según números finales conocidos hoy.
El control de los gobiernos de los 50 Estados del país es siempre importante en EEUU, pero más aún en esta elección por el poder que tendrán los futuros gobernadores para definir el mapa político y las políticas nacionales en el futuro cercano.
Los gobernadores no sólo jugarán un rol crucial para las elecciones presidenciales de 2012 ya que tendrán a su cargo la reestructuración de los distritos electorales que se realizará el año próximo en base a los datos del censo 2010.
Con un ojo puesto en 2012, los republicanos celebraron también victorias en las elecciones de gobernador de dos Estados clave para cualquier elección presidencial como son Florida y Ohio, que definieron al presidente en los comicios de 2000 y 2004, respectivamente.
