Con la sequía de precandidatas anotadas en la carrera por la corona de la Fiesta del Sol 2011, recobró protagonismo un viejo enemigo de las chicas que se suben a la competencia: el centímetro. El requisito excluyente de la estatura mínima de 1,68 sigue siendo una barrera dura de sortear. Y los organizadores del certamen insisten en que mantenerlo le da jerarquía a la corona. Pero esa exigencia, en realidad, prácticamente no se aplica en el resto de las elecciones para reina nacional que hay en el país. DIARIO DE CUYO sondeó en los requisitos de una decena de fiestas nacionales de renombre que se hacen en Argentina, y en ninguna de ellas le exigen a las candidatas a Reina que tenga un mínimo de estatura.
"Casi siempre terminan ganando las chicas más altas, eso es cierto, pero jamás se exigió un requisito de altura", contó Josefina Monasterio, miembro de la Comisión de Reinas de la Fiesta Nacional de la Manzana, que se hace todos los años en Río Negro. Lo que sí se exige, por ejemplo, es que las aspirantes sean solteras y sin hijos, otro requisito para ser Reina del Sol.
En Río Negro hay otras celebraciones remarcadas en el calendario turístico del país. En ellas se elige a la Reina Nacional del Tomate, la del Lúpulo y la de la Nieve, esta última en Bariloche, en una fiesta que logra repercusión internacional. Y en ninguna de ellas, dijo Monasterio, las aspirantes a soberana deben cumplir con un mínimo de estatura.
Más cerca en el mapa está la Fiesta Nacional de la Vendimia, en Mendoza. Y esta celebración fue usada como ejemplo en la crítica que encendió una fuerte polémica días atrás en la Facultad de Filosofía de la UNSJ. Lo cierto es que a la Reina Nacional de la Vendimia tampoco se le exige altura equis. Por ejemplo, mientras la actual soberana (María Flor Destéfanis) ostenta un espigado 1,70, la reina 2008 (Florencia Moreno, quien estuvo en Caucete junto a las soberanas nacionales de San Juan) medía 1,65.
La lista sigue. Una de las coronas de mayor impacto mediático en el país es la de la Reina Nacional del Mar, en el certamen que organiza el Ente Municipal de Turismo de Mar del Plata. Según datos oficiales, en las casi cuatro décadas que llevan haciéndolo, jamás pusieron un límite de estatura. Lo mismo sucede con la Reina Nacional de la Cerveza, que se elige en el Oktoberfest de Villa General Belgrano, una de las celebraciones nacionales con mayor afluencia turística que se hacen en Córdoba. Y con la Reina Nacional de la Flor, que surge de un concurso que se hace desde hace casi medio siglo en Escobar, provincia de Buenos Aires. Y, a nivel local, tampoco está el requisito de la estatura para elegir a la Reina Nacional de Santa Lucía ni a la Reina Nacional de la Uva y el Vino.
Donde sí figura este requisito es en las bases para aspirar a ser Miss Mundo Argentina o Miss Universo Argentina, dos certámenes internacionales distintos. En ambos casos, las chicas que miden menos de 1,70 no tienen posibilidades.
Justamente este aura de nivel mundial es lo que alienta a las autoridades locales a mantenerse firmes en pedir altura mínima de 1,68. "Lo que hacemos con poner estos requisitos es equipararnos con las grandes elecciones de reinas -dijo el secretario de Turismo local, Dante Elizondo-. Así, logramos que la elección tenga seriedad, jerarquía, no que sea algo chabacano o vulgar. Yo creo que a medida que la fiesta tenga más años, va a haber cada vez mayor cantidad de precandidatas porque las chicas se van a dar cuenta del nivel que tiene".
Además, el funcionario dijo que "no creo que el requisito de la medida sea el único problema. Muchas veces hay chicas que no llegan a tener el requisito de la edad o el de tener el secundario completo. Hay muchas fiestas en las que no hay requisitos de este tipo, pero termina habiendo reinas que tienen 15 años".
