Lo que no pudieron borrar 15 años de recuerdo por aquel conmocionante caso de la desaparición y asesinato de la psicóloga María Rosa Pacheco de Balmaceda, parece conseguirlo la justicia que dejó casi en el olvido las investigaciones sobre el crimen. Fuentes judiciales indicaron que, desde que absolvieron a su esposo Juan José Balmaceda y al cuñado Jorge Balmaceda, las causas por el asesinato y por los presuntos falsos testimonios durante el juicio no avanzaron.
Pasó mucho tiempo desde aquella fría noche del 2 de junio de 1996 cuando María Rosa desapareció misteriosamente al salir del Sanatorio Almirante Brown. El hallazgo de su auto quemado días más tarde, y después de esos huesos, fue el preludio de uno de los casos policiales más impactantes de San Juan que hasta la fecha no tiene respuesta.
El juicio en 1999 sirvió para absolver a Juan José Balmaceda y Jorge Balmaceda -a los que acusaban del homicidio, por un móvil pasional-, pero dejó grandes interrogantes. El punto central: qué pasó con la psicóloga de 34 años que trabajaba en un área del Ministerio de Educación y en una institución que trataba a jóvenes con adicciones a las drogas. Nunca se llegó a saber si el crimen tuvo que ver con su actividad laboral.
La causa por el asesinato, que en principio investigó el juez Agustín Lanciani del Segundo Juzgado Instrucción, fue a parar al Tercer Juzgado de Instrucción. Fuentes judiciales confiaron que actualmente esa investigación está estancada. El abogado Mario Pellegrini, que actuó de defensor de los Balmaceda, contó que lo único que recuerda fue que hace 2 años le tomaron declaración por una denuncia que él mismo hizo por un desconocido que se presentó en su estudio diciendo que tenía datos del crimen y que luego desapareció. "Por lo que yo conozco, no se avanzó en nada", afirmó.
El mismo destino parece tener la causa que recayó en el Primer Juzgado de Instrucción contra 20 testigos del juicio, entre ellos 8 policías y funcionarios, por presunto falso testimonio. El juez Leopoldo Zavalla Pringles dijo ayer que "se practicaron algunas medidas", pero no dio precisiones. Reconoció que al no haber querellantes la causa no se mueve. De hecho, esos delitos ya están prescriptos.
El abogado Jorge Ocampo, otro ex defensor de los Balmaceda, fue tajante: "Las causas penales fueron sepultadas. Hay una inacción total en los juzgados". Hasta la familia de María Rosa perdió las esperanzas. "Por una cuestión de tranquilidad para todos, dejamos un poco de lado la causa judicial. Esta situación de pelear en la justicia desgasta mucho, además nunca tuvieron intención de que el caso se aclare. Para algunos es mejor que quede así, tal como pasa con el caso Tellechea y otros hechos", expresó Mónica Pacheco, hermana de la psicóloga. Hoy, su familia volverá al cementerio para recordar a María Rosa Pacheco de Balmaceda como hace 15 años y con el dolor de aquel entonces de no saber quién se la llevó esa noche.