�San Martín comenzó a gobernar cuyo en 1815. Y si bien se instaló en Mendoza, a San Juan la tomó como la provincia clave para llevar a cabo su estrategia militar que se materializó en 1817, con el triunfo de la batalla de Chacabuco, tras cruzar la cordillera de los Andes.
Desde 1815 a 1817, el Libertador ordenó todos los engranajes. En San Juan tenía a su alfil: Ignacio de la Roza, que fue una pieza clave para llevar a cabo el plan ideado por el Padre de la Patria, ya que fue el encargado de cuidar la retaguardia, y lejos del campo de batalla fue quien gestionó desde cañones y artillería para el cruce, hasta la construcción de hospitales.
En febrero próximo se cumplirá 200 años del inicio de la estrategia sanmartiniana, que culminó en 1817. El Libertador comenzó a cruzar los Andes en enero de ese año y el 12 de febrero, él y su ejército, ya en Chile, derrotaron a los realistas. En dos años armó y proyectó un ejército para la victoria. Para hacer el cruce confió en arrieros y baqueanos. Su plan se basó en hacer que 6 columnas atravesaran el macizo por distintos puntos para despistar al enemigo. Su proeza militar radicó en preparar, concentrar y dirigir un ejército de 5.000 hombres.