Aprender a esquiar no es algo imposible. En todos los centros de esquí, incluyendo los que hay en el país, suelen haber instructores que dan clases a los principiantes. Estos pueden ser niños, adolescentes y adultos de ambos sexos. En San Juan también hay profesionales que se dedican a llevar este aprendizaje a quienes desean tener una experiencia excitante y divertida en la nieve. Uno de ellos es Luis Tanoni, quien además es guía de montaña y tiene años de experiencia en el rubro.
El aprendizaje del esquí es recomendado debido a que estimula la circulación sanguínea, tonifica los músculos de las piernas, abdomen y glúteos. También es desestresante, comenta el instructor.
Según Tanoni, el aprendizaje del esquí es accesible, ya que no demanda gran esfuerzo físico. Lo pueden comenzar a practicar personas desde los 4 años de edad hasta los 60. Este límite es a causa de posibles enfermedades de los huesos como hosteoporosis o artrosis que pueden causarle lesiones a quienes se arriesguen.
Para comenzar en la actividad no hace falta tener que comprar todo el equipo. Es que también hay posibilidades en el mercado local de adquirir estos equipos por medio del alquiler, por lo que se abaratan los costos. El instructor comenta que el hecho de alquilar equipos le abre la posibilidad a la clase media de poder practicar el esquí de forma masiva. Esto hace que haya cada vez más familias sanjuaninas que aprovechan para iniciarse o continuar en esta disciplina.
En la provincia hay locales donde se puede adquirir estos equipos que van desde botas, esquíes, bastones, antiparras, entre otros.
En San Juan el único lugar apto es Manantiales, ubicado a 80 kilómetros al Oeste de Barreal, Calingasta. Pero ese sitio tiene una infraestructura limitada, que cuenta con 20 camas y es utilizado por los miembros del Esquí Club San Juan, cuenta Tanoni.
Entonces para comenzar con este aprendizaje, los lugares más cercanos están en Mendoza, como por ejemplo Penitentes y Las Leñas.
Para la primera clase sólo basta con colocarse las botas y los esquíes para practicar sobre una rampa alfombrada las técnicas de doblar, frenar, y levantarse del suelo ante una caída. La segunda clase se realiza ya en la nieve del centro de esquí y en el mismo día si el alumno tiene buena predisposición y facilidad para el aprendizaje se estará ejercitando en las pistas intermedias. De lo contrario deberá asistir en otra oportunidad para lograr dominar la técnica en las pistas de mayor pendiente.
El aprendizaje de la técnica es rápido en los chicos de hasta 10 años, y se demora más en aprender a medida que los alumnos tienen más años. En este segmento se encuentran las personas de 40 ó 50 años, que deberán tener por lo menos unos 3 ó 4 días de clases de esquí intensivo para dominar las técnicas.
Otra razón por la cual se recomienda contratar al guía de su ciudad, es porque que le brindará la confianza necesaria a la hora de emprender esta aventura. Este instructor aconsejará acerca de todos los servicios necesarios para ir a la nieve, como traslado hasta el centro de esquí, clases teórico prácticas antes del viaje, asesoramiento del lugar de alquiler de equipo acorde a su nivel de iniciación y económico. Además de conocimiento de la ruta y lugar de hospedaje en el centro invernal con mejores comodidades, servicios y comidas. También se asegura de tener un viaje de esquí con aprendizaje asegurado y gratificante.
Como toda actividad recreativa que en algunas personas puede desembocar en práctica deportiva, cuanto más pequeños sean los interesados en cuanto a la edad, más fácil y rápido resultará llegar a dominar la técnica del esquí, concluye Tanoni.